El Mont Saint Michel es el segundo lugar más visitado de Francia (después de la Torre Eiffel) y su icónico perfil es inconfundible, así que durante nuestro roadtrip por Francia no podíamos dejar pasar la oportunidad de conocerlo. De hecho fue el punto de partida de nuestra ruta por Normandía (aunque aún hay debates sobre si el monte es normando o bretón…).
Tras instalarnos en el alojamiento que habíamos reservado en Beavouir (puedes ver cuál era en este post) nos acercamos en coche hasta el parking de entrada. Nuestra intención era pasar el día allí y quedarnos hasta la subida de la marea.
Cómo llegar
Desde hace un tiempo no es posible acceder al monte en coche; se han habilitado unos párkings (11,70 euros todo el día) y luego el acceso puede ser de tres formas:
- En lanzadera (le Passeur): Un autobús con una forma bastante curiosa que te acerca de forma gratuita hasta el final de la pasarela que da acceso al monte. Durante el recorrido hay algunas paradas en la zona ‘comercial’. El horario es de 07.30 a 00.00.
- En coche de caballos (la Maringote): Es una forma diferente de hacer el recorrido hasta el monte, con mucho más encanto. Evidentemente, es una opción de pago. La duración del trayecto es de unos 25 minutos.
- Caminando: El párking no está demasiado lejos y dando un bonito paseo de unos 40 minutos se llega al final de la pasarela.
La visita
El recinto del Mont Saint Michel es de libre acceso (excepto la abadía), así que cada uno puede recorrerlo a su ritmo. Tampoco es que haya muchísimas calles (no es como Carcassonne), así que al final la mayoría de la gente acaba en los mismos lugares. Mucha gente también visita este lugar para disfrutar del espectáculo de las mareas, del que os hablaré más adelante.
La abadía
Visitar la abadía tiene un coste de 10 euros (niños gratis) y es una actividad interesante a realizar aunque si van niños pequeños igual no les llama demasiado la atención… En estos momentos siempre viene bien utilizar algunos de esos comodines que llevamos para que se entretengan. Para llegar a ella nosotros evitamos subir por la calle principal, que acostumbra a estar abarrotada. Con tanta gente corríamos el riesgo de llegar tarde a la visita guiada en castellano (a las 16.00 cuando estuvimos, aunque mejor consultar los horarios en la oficina de turismo que se encuentra a la entrada). Para subir por un camino menos concurrido salimos al exterior del recinto, pasamos por la zona donde está la gendarmería (edificio a la derecha si tenemos la abadía a la espalda) y después únicamente hay que subir… De esta forma te evitas el bullicio de la calle principal en el que, depende del momento, puede ser difícil avanzar.
Durante la visita se explica que la abadía benedictina, cuya construcción se comenzó en el siglo X tiene partes carolingias, románicas y góticas. El guía, muy amable y explicando multitud de curiosidades, te va guiando por diferentes estancias. A veces cuesta mucho orientarse!
Es una visita que vale la pena realizar si se está por la zona… alucinarás con el recorrido: subir escaleras, bajarlas, cambios de salas, espacios abiertos, salas grandísimas…
Las mareas
Además de la silueta y de la situación de la abadía del Mont Saint Michel, el lugar es mundialmente conocido por ser el escenario de las mayores mareas de Europa.
Cuando la marea está baja, el mar puede estar a 15 kilómetros de la costa… Por otro lado, hay algunos momentos durante el año en que el monte se convierte en una isla. Es un espectáculo totalmente imperdible si se está por la zona.
Es muy importante planificarse y consultar el horario de las mareas para cuando se vaya a realizar la visita (lo podéis hacer en la web oficial). Disponéis de dos oportunidades al día para ver la marea y es recomendable estar dos horas antes de que comience para disfrutar de todo el proceso.
Nosotros nos quedamos hasta última hora para ver crecer la marea por la noche… empezó a eso de las 20.30 y nos quedamos unas dos horas.
Se trata de una sensación rara… antes de que empezara teníamos la vista fijada en un lugar al horizonte para intentar visualizar cómo iba subiendo; sin embargo, cuando comenzó a subir vimos que no hacía falta… de repente se empezó a escuchar un ruido constante de olas y a los pocos segundos comenzó a llegar agua. Es alucinante ver, a simple vista, cómo va subiendo el nivel por momentos.
Nosotros nos pusimos justo entre la pasarela y la entrada al recinto y mirando hacia la derecha… El día que estuvimos nosotros el monte no llegaba a convertirse en una isla, pero le faltó poco. De verdad, el fenómeno nos dejó con la boca abierta.
Dónde comer
No hay que olvidarse dónde estamos… comer bien y a buen precio dentro del recinto puede resultar algo complicado. Nosotros seguimos una recomendación bloguera y fuimos a comer a un lugar muy pequeñito (y escondido) en el que los precios son muy razonables: Crepería la Sirena. Podéis ver las reseñas que tiene en TripAdvisor. Está en la primera planta de uno de los edificios de la calle principal y se entra desde una tienda de souvenirs. En dirección a la abadía se encuentra en los edificios de la izquierda, más cerca de la entrada que de la abadía. Hay un pequeño cartel indicativo.
Para la cena nuestra idea fue acercarnos hasta la zona comercial para comprar algún bocata y comer viendo subir la marea… Nos acercamos con la lanzadera y… nos llevamos una gran decepción porque en ninguno de los restaurantes que había hacían comida para llevar; el único lugar que encontramos para comprarlos fue en una tienda que vendía souvenirs y ‘de todo un poco’. Eran bocatas envasados y bastante caros, la verdad… Si tenéis intención de quedaros a cenar por la zona y no queréis ir de restaurante os recomendamos que dejéis bocatas hechos / comprados en el coche, os acerquéis con la lanzadera y volváis al monte… no tardaréis más de media hora en hacerlo todo.
Y este fue nuestro día visitando el maravilloso Mont Saint Michel. Un día de lo más completo en el que tuvimos un poco de todo 🙂
ivan dice
hola que coste tiene hacer el viaje de normandia+paris+disneyland en coche?
Saludos.
Oscar Espinosa dice
Hola! Es un post que aún tengo pendiente… pero claro, depende mucho de la duración del viaje y de cuántas personas van a participar. Las partidas de París (número de días y tipo de alojamiento) así como la estancia en Disneyland (tipos de entradas, comidas, alojamientos, número de días…). Tengo planificado preparar este post próximamente 🙂
Carol dice
Hola, voy a visitar la zona el próximo mes con peques. Estuvisteis todo el día visitando el Monte o lo compaginasteis con otro sitio?? muchas gracias
Oscar Espinosa dice
Hola Carol.
Estuvimos todo el día, pero no llegamos muy temprano. Íbamos con la intención de quedarnos a ver la subida de la marea, que era hacia las 20.00 y fuimos con la calma. Depende del plan que tengáis, es combinable con algún lugar cercano.
Disfruta!
María dice
Buenas,
os agradezco todos los consejos y experiencias que habéis dejado.
Me gustaría preguntaros por la visita guiada en castellano de la abadía, ¿con quién o cómo la contratasteis?
Gracias y un saludo.
María
Oscar Espinosa dice
Hola.
No hicimos nada especial. Compramos la entrada anticipadamente (recomendable) en el siguiente enlace (https://bit.ly/msmichelCPSP) y buscamos hueco para la visita en el idioma, siempre que haya plazas.
Oscar